Han pasado casi dos meses desde que la Autoridad Nacional Palestina solicitó ante Naciones Unidas su reconocimiento como miembro de pleno derecho. Durante este tiempo y pese a la supuesta importancia de esa petición, la atención mediática seguía centrada en la manipulación de asuntos como la “primavera árabe” o ese ejercicio humanitario y liberador de la OTAN que consistió en 7 meses bombardeando uranio para provocar un cambio de régimen en Libia. Y donde antes había un indeseable “ex-amigo” (al que “había que matar”), ahora hay miles de cadáveres y unos cuantos “indeseables amigos” (que matan y se matan entre ellos).
Lo que no es “primavera árabe” para la agencia terrorista (y que nadie olvide al Reino de España cuando se menciona a la OTAN) es, por ejemplo, la sangrienta represión que el pueblo de Bahrein ha sufrido por salir a la calle a pedir democracia. Los bahreinís viven sometidos a una dictadura-monarquía títere de Arabia Saudí. Médicos y enfermeras han llegado recibir condenas de 15 años de cárcel por atender a los heridos de las manifestaciones.
Lo que no es “primavera árabe” para la agencia terrorista (y que nadie olvide al Reino de España cuando se menciona a la OTAN) es, por ejemplo, la sangrienta represión que el pueblo de Bahrein ha sufrido por salir a la calle a pedir democracia. Los bahreinís viven sometidos a una dictadura-monarquía títere de Arabia Saudí. Médicos y enfermeras han llegado recibir condenas de 15 años de cárcel por atender a los heridos de las manifestaciones.